A escasamente un kilómetro de la esclusa de Gay, nos encontraremos con la esclusa de Vivier. Se trata de una esclusa triple.
En la misma esclusa, frente a la casa del esclusero, encontramos un antiguo molino de harina, construido para aprovechar el salto de agua. Hoy funciona como tienda de harinas, granos y productos locales. El molino de Vivier, es el punto de encuentro de productores artesanos apasionados al servicio del consumidor.Confituras, mieles, almíbares, aceites, vinagres, vinos, aperitivos autóctonos, y cremas de violetas, mandarinas, menta … y muchos otros productos seleccionados con el mayor mimo.
Productos nobles, auténticos y refinados en un ambiente gourmet.
Muy cerca se encuentra tambien le Bistro 113.

Dejamos una muestra de su carta.